“I am the voice for the voiceless. Believe me, I’m yelling.”
Meet Maria Remington, Promotora de Salud (Community Health Worker) in the Walla Walla Valley. While all of our farmers in this program are called ambassadors, Maria is, quite literally, a farmer ambassador. Her role as Promotora de Salud is to be a liaison for the Hispanic community, with a particular focus on vineyard workers. Funded by Vital Wines, whose mission is to improve access to healthcare for vineyard workers and cellar workers in the Walla Walla Valley and surrounding communities, and Providence St. Mary Medical Center, this position is much needed, and long overdue.
“The disparities in healthcare are big here,” Maria said. “We don’t have access. The language and cultural barriers are amazing.” Maria comes from a family of teachers, and spent a large part of her career in education, much of which she brings to the table in this role, as she organizes and facilitates monthly workshops based on the needs of the community. While her everyday is about responding to the needs of right now, Maria’s goal is more long-term. “The need is everywhere,” she said. “The relationships that I have with people are not from yesterday. It’s a long process, and it’s going to take time. But I’m everywhere.”
Traducido por David Rodriguez
Washington Wine: Maria, cuéntanos cómo ha sido para ti, el puesto de promotora de salud.
Maria Remington: Bueno, quisiera decirte algo primero. Cuando miré este puesto, mi corazón estaba acelerado. Este puesto sirve a la comunidad, a la comunidad hispana de aqui. No sabia mucho sobre salud. No soy una enfermera, soy maestra. Mi corazón no dejaba de estar acelerado. Me dije a mi misma, voy a aplicar para este puesto porque conozco a mi población hispana de Walla Walla Valley y de Walla Walla County en el norte de Washington y en Oregon.
Se que las disparidades en el ambito de la salud son grande aquí. No tenemos acceso, no tenemos una buena atención médica. También, la barrera del lenguaje y la barrera cultural son inmensas. Me encanta el trabajo, es mi pasión. Estoy siguiendo mis pasiones. Escogiendo este puesto, estoy siguiendo mi pasión, creemelo. Puedo tener un plan. Como el día de hoy, tengo un día planeado, pero puedo tener una emergencia con alguna persona. Necesitan mi experiencia para traducir o buscar recursos, así que necesito estar disponible. Un día puedo planear juntas, abogar por mi comunidad, buscar recursos, crear talleres. Me di cuenta que mi comunidad hispana, no saben cómo manejar este complicado sistema de salud. No sabemos donde podemos empezar. Yo era una de ellas, no sabía hablar inglés, no sabía cómo comenzar. Para mi, era fácil porque mi esposo ya había estado aquí. Entonces, fue un camino fácil, sin embargo me di cuenta que algunas personas no saben como tener el acceso a un médico, por ejemplo, o a una mamografía.
Todos los días hago algo diferente, como citas para una junta sobre COVID, juntas con la ciudad de Walla Walla para buscar recursos o asociaciones, o buscar recursos que puedan apelar por mi población hispana. El otro día tuve una paciente suicida, que quiso quitarse la vida. No soy una experta en ese tema, así que llame a la “Life Line” que tenemos para ese caso. Nadie de los que estaban ahí pudo ayudarme ya que no había alguien que hablara español. ¿Por qué la comunidad hispana no confía en el Sistema? ¿Qué podemos hacer para crear una relación? Que el hospital ofrezca más recursos, y especialmente confianza, es un gran problema en Walla Walla Valley.
WW: Con tanta necesidad, ¿a quiénes y cómo ayudas?
Maria: No solo son las personas que trabajan en los campos, obviamente ellos son los principales clientes que tengo ahora, pero la necesidad está en todos lados, las personas nos necesitan. Los que limpian hoteles o casas, nos necesitan. Estas personas llegan por un trabajo temporal, o como padres tienen necesidades, y simplemente no saben cómo ayudar a sus hijos. También las personas con adicciones necesitan de nosotros. La salud mental, por dios, es otro gran problema, no tenemos agentes que hablen español y ellos son biculturales. Trabajo más de 40 horas, pero amo cada una de ellas.
Estoy conectada y emocionada. Cada mes tengo talleres con agentes que hablan español. Los temas están relacionados a las necesidades que la comunidad hispana tiene. ¿Cómo lo hago? Se los pregunto, voy a donde ellos estén y les pregunto qué es lo que quieren o qué tema les gustaría. Por ejemplo, ellos están muy interesados en que el tema de enero sea sobre el cáncer de mama, así que estoy trabajando en ello.
WW: Parece que es aquí donde tu formación académica entra perfectamente. Que enseñabas y para qué edades lo hacías? ¿Quién es la maestra Maria?
Maria: Toda mi familia son maestros, yo no quería ser maestra. ¿Sabes por qué? Porque los maestros son mal pagados, no hacen dinero, es por eso que no quería ser maestra. Vine a los Estados Unidos y la única oportunidad de trabajo que tenía era en un programa bilingüe que tenemos aquí en Walla Walla, en el que niños pueden aprender inglés y español. Trabaje ahí, y ahí fue donde me enamoré de ser profesora. Solía enseñar desde preescolar a quinto grado, y luego por supuesto, estoy enseñando en la universidad comunitaria a la población hispana.
WW: ¿Tienes una edad favorita a la que has enseñado?
Maria: Me encanta enseñar a los niños de preescolar y a los adultos. Mis favoritos son los adultos mayores de 40 años ya que ellos ya han experimentado más la vida.
WW: Tengo curiosidad de escuchar más sobre tus talleres.
Maria: Hemos hecho hasta ahorita cuatro talleres. Uno fue sobre los mitos y las verdades del COVID. Ese fue en verdad un gran trabajo, ya que la comunidad hispana de aquí, tiene mucha información falsa sobre el tema. No quiero decirles lo que deben hacer, sin embargo quiero educarlos. Esa es la pieza clave de un educador. Creo en la educación, y en que podemos educarlos. Cuando ellos han tenido una educación y certeza sobre ella, ellos pueden hacer las cosas mejor y escoger mejor. Estoy muy orgullosa de eso. Ayudo con citas, transportación o lo que sea. Hago todo.
WW: Tengo curiosidad sobre este puesto de Promotora de Salud. ¿Es este el primero de este tipo?
Maria: Soy la primera aquí en Walla Walla, así que es una gran responsabilidad. Créeme, todo el tiempo, y hay veces en las que no duermo, por estar pensando en cómo puedo manejar correctamente este puesto, ya que hay muchas personas que tienen altas expectativas. Ojalá pueda llenar sus expectativas. Para mí, especialmente porque veo la necesidad de las personas, y es una gran responsabilidad.
Soy nueva en esto. El Dr Timothy Davidson del Hospital Providence me ha ayudado bastante. En la industria de la salud, todo es nuevo y necesito mentores . El me ayuda bastante, me presenta a los proveedores, doctores, y a todos, ya que no conocía a nadie aquí.
WW: No se como expresar esto, pero, ¿es una extraña ventaja para ti? El hecho de llegar como principiante al campo de la medicina, sin tener todo el conocimiento. ¿Puedes ver cuales son las barreras? ¿Eso te ayuda a ti a ayudar a otros?
Maria: Yo pienso que sí, definitivamente lo creo porque puedo verlo. Por ejemplo, el otro día tuve a una mujer que como inmigrante, no hablaba inglés. La ayudé a que pudieran hacerle mamografías que nosotros ofrecemos gratuitamente aquí en el Hospital Providence. No tenía CPC, ni un proveedor, no sabía cómo manejar el sistema del seguro. No sabía cómo hacerlo. No maneja, entonces estuve con ella durante todo el proceso. De esa manera, yo también podía aprender.
Tambien tuve a otra mujer que trabajaba limpiando casas y hoteles. No tiene su documentación, lo que es aún más difícil. Tengo muchas personas, que han trabajado toda su vida aquí, se lesionan y ellos no tienen su documentación, entonces ellos no obtienen su jubilación. Es muy triste.
No se cuantas veces he llorado en los tres meses que tengo trabajando aquí. Es mucho llorar porque no se como ayudarlos. Pero con suerte, Podemos buscar la manera de que ellos puedan salir con ideas y recursos, especialmente recursos económicos, para así poder ayudar a las personas que más lo necesitan. Tenemos muchas diferencias en lo que la atención médica ofrece, especialmente en términos de lenguaje y barreras culturales.
Desde el primer día que puse mis pies en este pueblo—y ya pronto serán 20 años—decidí conocer a la comunidad hispana de aquí. Toda mi vida aquí en los Estados Unidos, trabajé en talleres, trabajo social y voluntariado. Las relaciones que tengo con personas no son de ayer. Es un proceso largo. Primero construir confianza con ellos. Necesito seguir trabajando en esa confianza para construir relaciones. De otra manera, las personas de aquí no confiarian en mí o nosotros. No es fácil confiar, es un proceso largo el cual se necesita tener con la población hispana. Si no hubiera tenido ningún conocimiento o relación, hubiera sido aún más difícil ya que no hubiera podido preguntarles, “¿Qué es lo que necesitan?’
Toma su tiempo, pero estoy en todos lados, creeme, todos lados, juntas con las comunidades, iglesias. Voy a todos los lugares en donde ellos estén, soy la voz de los que no la tienen.
WW: Cuál es el enfoque ahorita? ¿Es el conocer gente, reunir información y descubrir cómo difundir la información?
Maria: Si, es todo eso. Una de mis esperanzas es que el sistema educativo pueda ser una pieza de prevención en mi comunidad hispana. Estamos sufriendo. Ellos se esperan hasta que están enfermos y están en emergencias, y en algunas ocasiones ya es muy tarde. Mi esperanza con estos talleres y construir relaciones es conducir a mas educacion. Que las personas sepan, que tengan el conocimiento de: “tienes que ir frecuentemente al doctor de manera preventiva, no cuando ya estás enfermo.”
WW: ¿Cuál es una de tus metas para este año? ¿Es crear estructuras o es algo más?
Maria: Sueño bastante. Créemelo. Puedo ver a la comunidad con atención médica universal. Ese sería mi sueño hecho realidad: que ellos puedan ir al doctor de manera preventiva y que todos tengan acceso a la atención médica universal.
Los ayudamos comprandoles despensa. Es un buen programa el que se tiene. Me gustaría que la atención médica universal pagará a los trabajadores cuando estén enfermos. Otra cosa que estuve pensando es cuando se está embarazada, ellos necesitan cuidar de las mujeres embarazadas, como inmunizaciones o cuidados prenatales. Me gustaría ver más y más de eso también. Ese es mi sueño en el futuro: crear más recursos aquí en Walla Walla.
Algunas veces, no pensamos en nuestra comunidad hispana, ni en las diferencias culturales. Tenemos ciertas diferencias las cuales las personas de Walla Walla deben conocer. Estoy abogando también por eso.
WW: ¿Qué es algo que sientes que la gente no entiende, o que la gente no es consciente de que todos ustedes se enfrentan?
Maria: Buena pregunta. En resumen, no puedo tener ideas erróneas. Como por ejemplo, en esta entrevista, soy la única persona hispana, correcto? Tu no sabes cómo es ser inmigrante, cierto? A lo mejor lo sabes, no puedo saberlo. A lo mejor estoy teniendo una idea errónea sobre ti, pero ser emigrante y no hablar inglés, a veces tenemos ideas erróneas de que somos menos. Y entonces, no nos sentimos como si fuéramos parte de la comunidad. Creemelo, estoy gritando. Necesitamos crear espacios donde podamos sentirnos parte de esta integración, correcto? Para ser parte de este grupo. Lo veo en el sistema también: tienen muchas ideas erróneas. Necesitamos crear más espacios donde podamos sentirnos seguros aquí en este valle.
Es muy hermosa aquí en Walla Walla, tenemos gente hermosa, tenemos Vital Winery, y demasiadas organizaciones que quieren hacer el bien, pero no están haciendo el trabajo correcto, porque cuando ellos ven a la comunidad hispana, pueden pensar, “oh claro, quiero tener algo de diversidad” pero no están haciendo su investigación. ¿Cómo pueden servirnos de una mejor manera? Tu puedes pensar, “somos diversos, hablamos español.” Pero es más que eso. Yo creo que podemos hacerlo mejor. Ese es mi sueño, podemos hacerlo mejor pero requiere tiempo.
WW: Lo que dijiste sobre las ideas erróneas es muy importante. Es crucial para nosotros como individuos, entender que es lo que queremos hacer, qué es lo que actualmente estamos haciendo, y que es lo que otros necesitan que hagamos.
Maria: Exactamente. Y también cómo es que creamos conversaciones. Necesitamos sentirnos seguros, para así poder expresar nuestros sentimientos y que es lo que queremos. Aún no veo eso. Esa es mi esperanza con los talleres que estamos creando. Si no sucede con mis talleres, puedo pensar en otra idea para el próximo año. Necesitamos más personas que lideren. A veces, siento que necesito 10 Marias para estar en todos lados.
WW: Una última pregunta. Hemos hablado mucho sobre lo que haces por la comunidad hispana en Walla Walla. Pero, no llegamos a saber quien eres. Qué es lo que hace Maria. Háblanos un poco sobre ti, tu crianza y tu camino hacia este puesto de Promotora de Salud.
Maria: Soy del Ecuador, me mude aquí en el 2002 como estudiante internacional. No sabía nada de inglés, y debido a mi negocio en el Ecuador, quería aprender inglés. Esa era la idea principal: Venir a Pendleton. Fui al colegio comunitario a aprender inglés, allí conocí a mi esposo, y ahora estoy aquí con dos hermosas gemelas.
Cuando me mudé aquí a Walla Walla, me enamoré de las personas porque tuve la oportunidad de aplicar para un puesto en el colegio comunitario como instructor EGED. Tenemos un programa cada invierno en donde ofrecemos clases ESL, clases GED, cosas acerca de la ciudadanía y más. Tuve suerte de conseguir un puesto desde el principio, alrededor del 2004 creo. Desde entonces, he estado involucrada con cosas en la comunidad de aquí. Soy voluntaria para Coalicion de Derechos de Inmigracion, la cual es una muy buena organización que tenemos. También soy voluntaria para el Cuerpo de la Misericordia del Noroeste. No se si tu sabes eso, pero es un pequeño negocio. También doy clases. Todo está relacionado con la enseñanza. Estuve dando algunas clases en portland para personas que tienen pequeños negocios. Leí mucho en la biblioteca de Washington Humanities, como Primetime reading, no se como conoces ese programa.
Pase mucho años en la biblioteca con Washington Humanities. Hice eso por muchos años. También estuve ayudando con la recuperación, haciendo talleres para padres en cosas como: cómo educar sabiamente a nuestros hijos. Así que si. Hice muchas cosas hasta que encontre este trabajo. En verdad amo este puesto. Eso es todo. Es todo.
Translated by David Rodriguez
Washington Wine: Maria, tell us about what this position of Promotora de Salud has been like for you.
Maria Remington: Well, I want to tell you something first. When I saw this position, my heart was jumping. This position serves the community, the Hispanic community here. I didn’t know much about health. I’m not a nurse, I’m a teacher. My heart couldn’t stop just jumping. I told myself, I’m going to apply for that position because I know my Hispanic population here in this Walla Walla Valley.
I know the disparities in healthcare are big here. We don’t have access. The language and cultural barriers are amazing. I love the job, that’s my passion. I’m following my passion. When I choose this, I’m following my passion, believe me. I can have a plan. Like today, I have a day planned, but then I can have emergency situations with somebody. They need my expertise in translating or looking for resources, so I need to be available. One day, I have planning meetings, advocating for my community, looking for the resources, creating workshops. I noticed my Hispanic community: they don’t know how to navigate this complicated health system. We don’t know where we can start. I was one of them. I didn’t know how to speak English early in my life. I didn’t know how to start. For me, it was easy because my husband has been here. So it was an easier path, but I noticed some people don’t know how to have access to a doctor, for example, or a mammogram.
Every day, I do different things, like appointments for COVID vaccines, a meeting with the Walla Walla City, or looking for more resources or partnerships that can appeal to my Hispanic population. The other day, I had a suicidal patient. I’m not an expert in that, so I called the lifeline that we have for that case. Nobody over there was able to help me because they don’t have a Spanish speaker. Those disparities are present every day. Why doesn’t our Hispanic community trust the system? How we can build the relationship? Resources from the hospital (Providence St. Mary Medical Center) and trust, in particular, is a big problem in Walla Walla Valley.
WW: With so much need, who do you help and how?
Maria: It’s not just the people that work in the fields. Of course, they are the primary clients that I have right now, but the need is everywhere. They need us. The people cleaning hotels, cleaning houses, they need us. They are just arriving for the temporary work here, or they have needs as parents and they don’t know how to help their kids, or those with addictions have needs. Mental health, my gosh, it’s another big thing. We don’t have providers who speak Spanish and they are bicultural. I’m working more than 40 hours, but I love every one of them.
I’m connected, and I’m excited. I have monthly workshops with providers who speak Spanish here. The topics are related to the needs of the Hispanic community. It’s from the people. I go to where they are, and I ask them: what do you want? What topic do you want? They are very interested in the topic of breast cancer, so I’m working on it.
WW: It sounds like this is where you education background comes in perfectly. What did you teach and what age did you teach? Who is Maria the teacher?
Maria: My whole family are teachers. I didn’t want to be a teacher. You know why? Because teachers are underpaid. They don’t make money, so I didn’t want to be a teacher. I came here to United States and the only opportunity that I had was working in a dual language program that we have here in Walla Walla, so kids can learn English and Spanish. I was working over there and then I fell in love with being a teacher. I used to teach from preschool to fifth grade, and then of course to the Hispanic population here through the community college. I teach writing, reading, science, chemical equations, algebra, how to navigate the computer system, and all of that. I do everything, but everything for the Hispanic population.
WW: Did you have a favorite age that you taught?
Maria: I love the preschoolers and adults. My favorite ones are over 40 because they have the life experience.
WW: I’m curious to hear more about your workshops.
Maria: Already, we have done four workshops. One was on the myths and truths of COVID. That was my real big work, because the Hispanic community here, they have so much misinformation. I don’t want to tell them what to do, but I want to educate them. That’s the educator piece. I believe in education. I believe that we can educate them. When they have the education and the facts, they can do better. They can choose better. I’m so proud of that. I help with appointments, transportation, whatever. I do everything.
WW: I’m curious about this position of Promotora de Salud. Is this the first of its kind?
Maria: I am the first one here in Walla Walla, so it’s a big responsibility. Believe me: every day, sometimes I don’t sleep. I’m thinking about how I can fill this position because I know a lot of people are expecting a lot. Hopefully, I can fill their expectations. For me, especially because I see the need of the people. It’s a big responsibility.
I’m very new on this. Dr. Timothy Davidson from Providence Hospital helps me a lot. In the health industry, everything is new. I need mentors. He’s helping me so far a lot, like introducing me to the providers, the doctors, and everything because I didn’t know anybody there.
WW: I don’t know how to phrase this, but is this a weird advantage for you? The fact that you’re coming to the medical field fresh, that you don’t have all the insider knowledge. Can you see what the barriers are? Does that help you help others?
Maria: I think so yes, definitely, because I can see. For example, I had a lady the other day that, as an immigrant, she doesn’t speak English. I helped her with getting mammograms that we offer here at Providence for free. She didn’t have a provider. She didn’t know how to navigate the insurance system here. She didn’t know how to do it. She doesn’t drive, so I went with her through the whole process. That way, I can learn, too. And I have another lady who works. She cleans houses and hotels. She doesn’t have documentation. That is even harder. I have a lot of people, they work all their lives here and they get injured and they don’t have documentation, so they don’t have retirement. It’s very sad.
I don’t know how many times I’ve cried in the three months that I’ve been working. It’s a lot of crying because I don’t know how to help them. But hopefully, we can look for the resources and they can come out with ideas and resources, especially economic resources, so we can help them, the people that need the most. We have a lot of differences in what healthcare delivers, especially in terms of the language and cultural barriers.
From the first day I stepped foot in this town—and it’s going to be 20 years soon—I decided to get to know the Hispanic community here. All my life here in United States, I was working in workshops, social work, volunteering. The relationships that I have with people are not from yesterday. It’s a long process. I build trust with them first. I need to keep working in the trust to build relationships. Otherwise, here with our people in the valley, they don’t trust me or us. It’s not that easy to trust. If I didn’t have any knowledge or any relationship, that would be harder because I wouldn’t have been able to ask them, “What do you need?”
It takes time. But I’m everywhere. Believe me, I’m everywhere. Meetings for the communities. The churches. I go to wherever they are. I am the voice for the voiceless.
WW: What is the focus right now? Is it meeting people, gathering information, and figuring out how to disseminate information?
Maria: Yes, all of that. One of my hopes is that the education system can be a prevention piece in my Hispanic community here. We are suffering. They wait until they are sick and it is an emergency. And sometimes, it’s too late. My hope with the workshops and building relationships is to lead to more education. For people to know, to have that knowledge: “You need to go to the doctor frequently, for prevention, not only when you are sick.”
WW: What is one of your goals for this year? Is it creating structures or something else?
Maria: I dream a lot. Believe me. I can see the community having universal healthcare. That would be my dream come true: that they can go to the doctor for prevention and have access to universal healthcare for everybody.
And then of course getting time off for my workers, which is impossible. They don’t take off because if they take off, (most) don’t get paid. Or family leave when they are sick; they don’t do that. We have a nice program here at the Providence Care Connection where, if somebody gets sick with COVID, they can pay rent, energy bills, and other assistance. We also help with buying them groceries. It’s a nice program to have right now. I would like Universal Healthcare pay for when workers are sick. Another thing that I was thinking is when you are pregnant, they need care for pregnant women, like immunizations and prenatal care. I would like to see more and more of that, too. That’s my dream in the future: create more resources here in Walla Walla.
Sometimes, we don’t think about our Hispanic community. We don’t think about cultural differences. We have some differences that people need to be aware about here in Walla Walla Valley. I’m advocating for that, too.
WW: What’s something that you feel people don’t understand, or that people aren’t aware of that you all are up against?
Maria: That’s a good question. In short, I cannot have misconceptions. Like for example, here in this interview, I’m the only Hispanic person, right? You don’t know how it is to be an immigrant, right? Maybe you know, I don’t know. Maybe I have a misconception of you, but to be an immigrant, to not speak English, sometimes we have this misconception that we are less. And then we don’t feel like we are part of the community. Believe me, I’m yelling. We need to create spaces where we can feel part of this integration, right? To be a part of this group, too. I see it in the system, too: they have a lot of misconceptions. We need to create more spaces where we can feel safe here in this valley.
It’s very beautiful in Walla Walla. We have beautiful people. We have Vital Winery, and a lot of organizations that mean to do good, but they are not doing the right job because when they look at the Hispanic community, they might think, “Oh yeah, I want to have some diversity,” but they are not doing their research. How they can serve us in a better way? You can think, “We are diverse, we speak Spanish,” but it’s more than that. I think we can do better. That’s my dream. We can do better, but it takes time.
WW: What you said about misconceptions is so important. It seems like a common thread here is actual dialogue.
Maria: Exactly. And how we create the conversations, too. We need to feel safe so that we’re able to express our feelings and what we want. I don’t see that yet. That’s my hope with the workshops that we are creating. If it doesn’t happen from my workshops, I can come up with another idea for next year. We need more people that lead. Sometimes, I feel like I need 10 Marias to be everywhere.
WW: One final question. What makes Maria Maria. Tell us a little bit about you, your upbringing, and journey into this position of Promotora de Salud.
Maria: I’m from Ecuador. I moved here 2002 as an international student. I didn’t know any English and I wanted to learn English for my business in Ecuador. That was the main idea: to come to Pendleton, OR, which is 35 miles outside of Walla Walla. I went to the community college to learn English, and I met my husband over there. I’m now here with two beautiful twins.
When I moved to here to Walla Walla, I fell in love with the people because I had the opportunity to apply for the Community College position as an EGED instructor. We have a program every winter where we offer ESL classes, GED classes, citizenship stuff, and more. I was the lucky one to get a position from the beginning, around 2004, I think. Ever since, I have been involved with things in the community here. I’m volunteering for Immigration Rights Coalition, which is a great organization that we have here. I also volunteer for Mercy Corps Northwest. I don’t know if you know that, but it’s a small business. I teach classes, too. Everything is related to teaching. I was teaching some classes in Portland for people who have small businesses. And I did a lot of reading at the library with Washington Humanities, like Primetime Reading. I don’t know if you know that program.
I spent a lot of years at the library with the Hispanic community. I did that for a lot of years. I was also helping with Recovery, doing workshops for parents on things like how to raise our kids wisely. So yeah, I did a lot of things until I found this job. I really love this position. That’s all. It’s everything.